¡Qué difícil es el caminar,
si hasta mis sombra se hace pesada de cargar!
¿Dónde están los que hace un tiempo atrás,
a mi lado se jactaban la fidelidad?
Pero he aqué que estoy, de regreso hoy,
hacia aquél que me ama y desde siempre
me esperó.
Abandonado caeré,
entre tus brazos lo haré,
calor de hogar me darás,
mientras te escucho Papá.
Abandonado estaré,
no existe otro lugar,
más bello para quedar,
que en los brazos de mi Papá.
Dolorosa y triste situación,
de aquél que se creyó tan fuerte y sucumbió.
Llevo en mi mochila la traición
y una lista grande donde expliqué mi acción.
Pero una vez más, me sorprenderás,
cerrarás mis labios y a mi encuentro
te saldrás. Pablo martinez