“Seguir la estrella para encontrar al final del camino algo maravilloso”, dijo el Padre Ángel Rossi

viernes, 4 de enero de 2019
image_pdfimage_print

04/01/2019 – El Padre Ángel Rossi, nos invitó al desafío de seguir nuestra propia estrella interior. Y comenzó su reflexión diciendo que “En este recorrido que hacen los Magos está simbolizado el destino de toda persona”.

“Nuestra vida es un camino iluminado por luces -destacó- que nos permiten ver el sendero, que nos lleva a Jesús y al ideal de cada uno, o a la propia vocación, es el símbolo del recorrido de vida, reflejado por una estrella”.

En este sentido dijo que “El símbolo de aquellos que son capaces como estos magos, como estos sabios, de dejar de lado razonamientos y cálculos, siguiendo el corazón del que no se avergüenza por seguir una estrella, se lanza tras ella, porque la memoria del corazón les dice que al final del camino se encontrarán con algo maravilloso”.

El padre Ángel resaltó que “hay que estar abierto a lo impredecible”, es decir -dijo- “a las sorpresas, donde la meta no puede ser predicha con certeza, esto siempre tiene un componente de regalo”, indicó.

Citó a Pérez Reverte cuando habla del viaje de los reyes magos: “<Todo viaje conlleva a algo que incluso tiene más importancia que el propio viaje, que es la necesidad de ir más allá de lo conocido y de descubrir al otro>, es interesante esta reflexión desde lo humano”, indicó el Padre Ángel.

“En fin, los reyes magos partieron y se aventuraron, como por ejemplo Abraham, que salió sin saber precisamente donde iba… como el pueblo de Israel en el camino, como las mujeres que van al sepulcro al amanecer a pesar del obstáculo de la piedra… y lo que tenia que pasar le pasó a los magos como nos suele pasar a nosotros, la estrella de golpe se escondió… y aquellos hombres quedaron solitos y desamparados, quedaron lejos de su patria, lejos de la meta de su viaje, en fin, otros se habrían acobardado, lo lógico es que hubieran pegado la vuelta, pero la fe que ardía en sus corazones no se los permitía, por eso este camino tenía una sola dirección, un solo camino, que era seguir hacia delante“, destacó el padre Ángel Rossi.

“Los reyes magos se aventuraron -acertó el sacerdote jesuita- a seguir la estrella, y no se dejaron detener por la mansión tenebrosa del Rey Herodes“. En ese momento, recordó el padre Ángel, “Todo el mundo estaba edificado sobre el poder, el prestigio, el tener, la corrupción, y de golpe entra en crisis por un niño , esta es la paradoja, un niño los desbarata, los pone en tensión”. “A todo ese mundo inflado que hoy tiene su correlato, no hace falta ser muy genial para encontrar el paralelo en nuestros tiempos”, indicó.

“Los magos consiguieron superar ese momento crítico de oscuridad, porque se animaron a creer en las escrituras, que señalaban a Belén como el lugar donde debía nacer el Mesías”. “Los magos supieron encontrar esta luz de la astucia, cuando después de regreso a sus tierras, después de encontrarse con el Niñito y adorarlo, decidieron no pasar por el palacio tenebroso de Herodes, tal como él les había pedido, sino que marcharon por otros caminos”.

A la luz de esta reflexión el padre Rossi, dijo que “Siempre hay un camino de regreso, cuando uno se encuentra con el Niñito Dios, siempre volvemos por otro camino, volver por otro camino como símbolo de la conversión”.

“En definitiva -dijo- las personas somos como las estrellas, iluminamos a la gente que tenemos a nuestro alrededor, en fin, ojalá que esta fiesta ayude como el ejemplo de estos magos, que nos dicen: <¡Vamos! salgamos de estos lugares cómodos>, “en fin… los tres reyes magos salieron no para conquistar el mundo, si no para adorar a un recién nacido“, concluyó el padre Ángel Rossi, sacerdote jesuita y Superior de la Compañía de Jesús en Córdoba.