08/03/2023 – Fray José Guirado se refirió al pasaje de la transfiguración de Jesús y el por qué el Señor anticipa su gloria a los discípulos. “El desierto es poco atractivo, es un descenso a la propia humanidad. Así comenzamos la Cuaresma. Jesús lo hizo para abrir caminos. Y el camino del Tabor, en la transfiguración, es donde se ve el final de todo”, aseveró Pepe. “En el caminar de la vida hay una dimensión de profundidad. En el monte del Tabor está la profundidad de la luz, que es lo contrario a lo epidérmico, a lo aparente”, agregó el religioso.
“A veces tenemos dificultades para estar frente a la luz por distintos factores. Nos incomoda abrirnos a la luz, estamos tristes, apegados a nuestra miseria”, dijo Guirado. “La luz requiere que tengamos conciencia de dejarnos iluminar por Dios. Es necesario que elijamos vivir en la luz y no en las sombras, que le digamos un si consciente a Jesús. Tengamos en cuenta que la vida es proceso, estamos aprendiendo a vivir”, sostuvo.