Foto: El Papa Francisco visitó este sábado a los 19 niños ucranianos que están ingresados actualmente en el hospital pediátrico Bambino Gesù de Roma.
21/03/2022 – El exembajador argentino ante la Santa Sede, Vicente Espeche Gil, explicó, en diálogo con Radio María, porqué el papa Francisco no menciona al presidente ruso, Vladimir Putin, con nombre y apellido, cuando condena la guerra. El diplomático dijo que no son justas las críticas al Pontífice, a quien describió como un “profeta” que está haciendo gestos “sin precedentes” para frenar la guerra. Y sugirió: “Hay que escuchar lo que dicen los profetas, no lo que otros dicen de los profetas”.
Entrevistado en el programa Diálogos de Actualidad, el diplomático argentino de larga trayectoria, Vicente Espeche Gil, utilizó las mismas palabras que había utilizado el domingo último el papa Francisco para describir lo que está ocurriendo en Ucrania por la invasión del Ejército Ruso: “Es un crimen repugnante y sacrílego, como dijo el Papa”.
Y con el argumento de que el Pontífice está llevando adelante acciones y condenas de la guerra sin precedentes, afirmó que “no son justas las críticas” que se le formulan.
Desde su experiencia como exembajador ante la Santa Sede, Espeche explicó: “El Papa vive esta realidad de la guerra en su doble carácter de, por un lado, líder religioso, sucesor de Pedro, cabeza de la Iglesia Católica; y, por otro lado, como autoridad de la Santa Sede, un actor importante, moral, en la política internacional, que se inspira en la Doctrina de la Iglesia sobre las relaciones internacionales”. Y agregó: “Como líder religioso, Francisco predica la oración, la penitencia, el diálogo, la conversión, la misericordia y el perdón. Así, por ejemplo, el viernes consagrará Rusia y Ucrania al Corazón de María; también, en este carácter, ha hablado con el patriarca ortodoxo de Moscú, Kirill, como pastores de un mismo pueblo que cree en Dios, usando el lenguaje de Jesús que no es el lenguaje de la política, un diálogo que también muestra los límites que ha encontrado tradicionalmente la Iglesia ortodoxa rusa en su relación con el poder político a lo largo de la historia”.
“Pero Francisco -dijo el exdiplomático- también habla como autoridad de la Santa Sede, una institución que juega en la arena internacional desde hace siglos, que tiene relaciones con Ucrania y con Rusia, y con 182 países más; y con ellos hace valer su autoridad moral que no tiene otro poder, no tiene ningún atributo estratégico, geográfico, militar o económico. En este segundo carácter el Papa hizo un gesto inédito, fue personalmente a la misión rusa ante el Vaticano para rogar por la paz, es un gesto que no tiene precedentes, porque generalmente es al revés, los embajadores van a visitar al Papa”.
Consultado acerca de porqué Francisco no menciona a Vladimir Putin cuando critica la guerra, Espeche respondió: “Esto tiene una explicación muy razonable. Las palabras del Papa condenan duramente los hechos, pero no insultan a los responsables con quienes, por el contrario, procura entablar un diálogo, llamar a la recapacitación. El Papa privilegia los caminos de la reconciliación, la razón y el interés común para evitar males mayores. El condena los hechos, pero no puede insultar a las personas con las cuales está buscando entablar un diálogo”.
Cuando se le preguntó si había otras normas de protocolo o de procedimiento diplomático para intervenir en estos episodios bélicos, el exembajador ante la Santa Sede explicó: “Mire, normalmente, estas cosas se hacen en reserva, después la historia las reconoce. El Papa ha enviado emisarios… La conversación con Kirill debe leerse en este propósito. Pero hasta ahora no han tenido resultados que se puedan conocer. Pero el Papa tiene un lenguaje para condenar la agresión, la guerra, y lo hace todos los días. Y como dirigente político hace lo que puede, criticando los hechos, pero no entra en el juego del insulto que corta el diálogo”.
Para comprender mejor la afirmación de Espeche, vale citar lo que publicó, recientemente, en Twitter, el padre Antonio Spadaro SJ, director de la revista jesuita La Civiltà Cattolica: “La diplomacia vaticana es clara pero no publicitaria. Se utiliza para tejer y coser, no para cortar. No condena a los líderes religiosos o políticos, para que pueda seguir siendo de ayuda. Apela a la resolución de conflictos y condena las elecciones y acciones políticas o estratégicas maliciosas”.
Por último, Espeche Gil agregó: “Yo creo que Francisco es un profeta, y, como profeta, corre la suerte de los profetas a quienes es duro oír y fácil criticar. Yo prefiero ver y escuchar lo que dice el profeta, y no lo que se dice del profeta. Sin ir más lejos, el evangelio de hoy, habla de esto: ‘les aseguro que ningún profeta es recibido en su propia tierra’”.
Profeta de la paz También dialogamos con Marco Gallo, director de la cátedra Pontificia de la Universidad Católica Argentina, quien ponderó “todo lo que viene haciendo el papa Francisco desde el comienzo de su pontificado, por la paz, por el diálogo interreligioso, por el diálogo entre las naciones…es un verdadero profeta de la paz”, dijo.
Audio de la entrevista completa a Vicente Espeche Gil a continuación…
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