23/10/2020 – “Ya desde el año 1600 los nativos veneraban a la que llamaban la Señora Blanca”, expresó el padre Manuel Alfaro, párroco de la Catedral de Jujuy, al relatar el origen y devoción a Nuestra Señora del Rosario de Río Blanco y Paypaya.
En el marco de este nuevo Espacio de Animación y Encuentro del IV Congreso Mariano Nacional, y como parte de las actividades para vivir este Año Mariano Nacional, el padre Marcelo Amaya, desde Catamarca dialogó en Madre del Pueblo, con el padre Manuel Alfaro, párroco de la Catedral de Jujuy, a través del cual conocimos más sobre la devoción a Nuestra Señora del Rosario de Río Blanco y Paypaya.
El padre Manuel comenzó diciendo que “Hablar de la Virgen del Rosario es hablar de la historia de Jujuy, porque es una devoción que está desde el inicio de las tres fundaciones que tuvo Jujuy”. “Los españoles de aquel momento le ponían el nombre de un santo o de Cristo a los pueblos, por eso le pusieron San Salvador de Jujuy”. “Como tradición española tenían en su oratorio la imagen de una advocación a la Virgen, por eso trajeron desde España, la imagen de la Virgen del Rosario de Río Blanco y Paypaya”. “Ya desde el año 1600 los nativos veneraban a la que llamaban la Señora Blanca”.
Respondiendo a esta pregunta, que le realizó el padre Marcelo Amaya, el sacerdote indicó que “Los historiadores de acá de Jujuy, han hecho unos anales que está en el obispado de Jujuy, con todo lo que significan los milagros”. “Hay hechos muy bonitos de la historia, por ejemplo, el general Manuel Belgrano cuando realizó el Éxodo Jujeño, en 1812, hizo bendecir la bandera y allí se ve el cuadro que se presenta en el camarín de la Virgen, ahí se ve al General Belgrano, y se ve también la imagen de la Virgen del Río Blanco y Paypaya”.
“También los historiadores dicen se cuenta que cuando el general Güemes, cuando pasaba por acá antes de pasar por cualquier casa, tenía que pasar por la iglesia matriz para saludar a la Virgen”.
“En la Iglesia de Río Blanco, hay cuadros donde se conservan los ex votos o las promesas, como la gente lo llama, de lo que pidió por intercesión de la Virgen del Rosario”, indicó el padre Manuel.
Finalmente, el padre Manuel Alfaro, dejó un mensaje muy alentador, “Quiero dejar un mensaje de esperanza, partiendo del corazón de la Madre, de nuestra Mamita, la Virgen del Río Blanco y Paypaya, que siempre estuvo presente y lo seguirá estando”. “Yo los invito para que vayamos acrecentando nuestra devoción al Santo Rosario y a la Virgen María”, concluyó el Manuel Alfaro, párroco de la Catedral de Jujuy.
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