El niño no defrauda la espera

miércoles, 17 de diciembre de
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El niño no defrauda los nueve meses de la espera.

Se deja formar silenciosamente por el amor que lo gesta.

Así también Dios, vino hacerse de esta carne nuestra,

solicitando el amor de una joven, preparada para hacer su ofrenda.

Ella aceptó en nombre de todos, el que la Vida venga,

y ponga entre nosotros, para siempre, su tienda.

Esta fue su respuesta, generosa y materna,

la misma que a todos, nos invita a tenerla.

“Díganle sí, y el-Dios-con-nosotros, verán que llega.

Preparen el pañal, pues viene a sus vidas como guagua tierna.

Mírenlo, luego, en su cuna nueva,

y digan, si en algo les defrauda, su amor hecho certeza.

Mírenlo aupado, y digan: ¿qué más desean?,

¿qué más puede hablar de su amor por nuestra tierra?

Besen la carne del Amor, que besó así la nuestra.

Que el pobre bese su despojo, y vea qué lo llena.

Que el humillado bese al que se abaja, y vea quién lo eleva.

Que el débil bese al que es tan frágil, y sepa dónde está la fuerza.

¡Dale pronto tu beso, no tengas vergüenza,

que desde la eternidad, espera hacer contigo fiesta!

 

Javier Albisu

 

 

 

 

Fer Gigliotti