Corrió al encuentro de Simón Pedro y del otro discípulo al que Jesús amaba, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto”.
Pedro y el otro discípulo salieron y fueron al sepulcro.Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió más rápidamente que Pedro y llegó antes.Asomándose al sepulcro, vio las vendas en el suelo, aunque no entró.
Después llegó Simón Pedro, que lo seguía, y entró en el sepulcro: vio las vendas en el suelo,y también el sudario que había cubierto su cabeza; este no estaba con las vendas, sino enrollado en un lugar aparte.Luego entró el otro discípulo, que había llegado antes al sepulcro: él también vio y creyó.
Palabra de Dios
P. Juan Martinez
Buen día Amigos. Gustando la claridad de la visita del Señor nacido humilde en Belén y renaciendo en cada uno en Navidad nos dejamos iluminar por la Palabra de Dios en el día en que celebramos a San Juan apóstol y evangelista.
El texto de hoy asociado a la resurrección, nos lleva a la escena en que habiendo recibido el anuncio de las mujeres, Pedro y el discípulo a quien Jesús amaba y que la tradición afirma que es san Juan nos presenta una escena carga de movimiento.
Las mujeres corren al encuentro de los apóstoles, cuentan lo que ha pasado, los apóstoles corren juntos, pero destaca el evangelio que el otro discípulo, Juan, corrió más rápidamente y llegó antes, vio aunque no entró. Pedro unos pasos más atrás entra, ve y constata lo que han dicho las mujeres.
Pero será Juan quien al entrar y ve, CREE. Y ahí tenemos una linda clave para hoy. Celebrando la memoria de san Juan, aquel que reclinó el pecho en Jesús teniendo parte en los secretos de su amistad, podríamos pedir la agilidad de ir hasta el misterio, ver, reclinarnos en la amistad que Jesús nos ofrece y desde allí acrecentar la FE.
Que la claridad de Jesús en este tiempo ilumine tus pasos te lleve hasta Él y anime desde la fe a una adhesión, a una amistad creciente con Él.
Dios te bendiga.