“Tú mi Dios, te has hecho carne para
acercarnos a nuestra humanidad,
para compartir nuestros límites,
tu quieres estar para nosotros,
con nosotros y en nosotros.
Creemos que el pesebre resplandeciente
en la noche es la señal de tu amor por nosotros
y nos sentimos amados, perdonados, salvados,
buscados por ti también esta noche.
Creemos que cada hombre de buena voluntad
puede encontrarte nuevamente, encontrandose
de esta manera con sí mismo, y a los demás,
haciéndo actual la posibilidad de que entres en su vida,
porque tú, al nacer en Belén como
un humilde niño nacido de María,
nos has dado la certeza de dicha posibilidad”
Card. Carlo María Martini