Siempre que tengo que hablarte nose como hacerlo. Siempre que intento acercarme a vos me termino alejando, y creo que es por miedo. Pero… ¿miedo a qué?
Miedo a fallarte, a equivocarme, a decepcionarte, pero eso no te importa. Puedo negarte, enojarme, equivocarme y fallarte, pero después me acuerdo de algo: vos diste tu vida por mí. Cada una de tus llagas y clavos fue para salvarme, y yo simplemente me justifico y por momentos me avergonzaba de vos.
Pero no te importa, me queres a tu lado y me seguís mirando del mismo modo en que miraste a tu amigo después de haberte negado, aunque el juro que no lo iba a hacer. Por momento tu amor me parece imposible, incomprensible, pero después lo entiendo. Lo entiendo cuando veo un nene reír, o alguien que abraza a un abuelo, lo veo en el rostro de los enfermos que no pierden la fe, aunque su vida este colgando de un hilo.
Cuantas veces me enoje con vos. Cuantas veces deseé no llevar más esta cruz. Mil veces hablaba con vos mientras el llanto me ahogaba e intentaba busca un porque a mi. Intentaba culparte de cada miseria que me invadía y no aceptaba que muchas de esas miserias yo mismo las había provocado.
Tantas cosas te hice amigo mío, tantas veces te lastime. Cada vez que lastimaba a mis hermanos te lastimaba a vos, cada vez que peco es un latigazo que doy en tu espalda.
Quiero confesarte que quiero intentar seguirte, saber qué queres de mí, pero el miedo me frena.
Dame toda esa fuerza que no tengo para poder seguirte y ayudarte en lo que más pueda. Quiero sanar tu herida, abrazar la cruz que rechacé, y saber que las cosas pueden pasarme a mí, por qué no me pasarían, si soy igual al resto.
Quiero decirte que te amo y que desde hoy estoy en tus manos para lo que quieras, porque sé que me queres ver bien y feliz y porque me amas.
Gracias por quererme con todos mis defectos. Defectos que para vos son potenciales virtudes en el plan que tenes para mí.
Quiero que sepas que te amo y que doy mi vida con total de poder avisar a todo el mundo que hay un amor que es capaz de lo imposible y que es más fuerte el que odio y la muerte. Un amor que sos vos y estas por venir dentro de muy poquito y yo desde el momento en que me pensaste para ocupar un lugar en tu plan es que estoy dispuesto a entregarme.
Aunque muchas veces dude y este inseguro, con miedo, sé que al lado tuyo voy a ser feliz, sin importar como sea mi caminar, sé que el camino es el correcto.
Te amo y espero Jesús.