En el primer Ángelus tras la Jornada Mundial de la Juventud, el Papa Francisco recordó su viaje a Río de Janeiro y agradeció a todos los jóvenes su participación en el evento. Además pidió a los peregrinos en San Pedro que rezaran con él por los participantes de la JMJ Río 2013.
“Quisiera pedirles que recen conmigo para que los jóvenes que han participado en la Jornada Mundial de la Juventud puedan traducir esta experiencia en su camino cotidiano, en los comportamientos de todos los días; y que puedan traducirlo también en elecciones importantes de vida, respondiendo a la llamada personal del Señor.”
El Papa dijo que el mensaje que los jóvenes se llevaron de la JMJ combatirá los efectos de la vanidad y el consumismo que calificó como “el veneno del vacío".
Además dijo que la alegría, que dan Jesús y la Iglesia, es el auténtico valor en la vida.
“La verdadera riqueza es el amor de Dios, compartido con los hermanos. Aquel amor que viene de Dios y hace que nosotros lo compartamos; y nos ayudemos entre nosotros. Quien tiene esta experiencia no teme la muerte y recibe la paz del corazón.”
Después del rezo del Ángelus, el Papa felicitó especialmente a todos los sacerdotes del mundo en el día de su patrón, San Juan María Vianney. Además señaló que, este lunes, Roma celebra la festividad de “Maria Salus Populi Romani” por la que el Papa Francisco siente una especial devoción. Finalmente, recordó que el martes se cumplen 35 años de la muerte de Pablo VI.
Fuente: Rome Reports