San Pedro Apóstol

lunes, 29 de junio de

San Juan Pablo II contaba de, el primer Papa, Vicario de Cristo, la siguiente anécdota:

 

“Según una antigua tradición durante la persecución de Nerón, Pedro quería abandonar Roma. Pero el Señor intervino, le salió al encuentro. Pedro se dirigió a Él preguntándole:

 

– Quo vadis, Domine?: ¿Dónde vas, Señor?.

 

Y el Señor le respondió enseguida:

 

– Voy a Roma para ser crucificado por segunda vez.

 

Pedro volvió a Roma y permaneció aquí hasta su crucifixión.”

 


 

 

Cuentan que San Pedro, minutos antes de ser crucificado en Roma, exclamó:

 

– ¡Señor, yo he deseado imitarte… pero no me consideré digno de ser crucificado en la posición en que a ti te crucificaron!

 

De esta manera, Pedro murió mártir, crucificado con su cabeza orientada al suelo…

 

 

Fuente: Recursos Católicos

 

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