La tradición de la Iglesia recomienda saludar e invocar al Ángel de la guarda durante el día, especialmente con las siguientes oraciones:
Ángel de Dios,que eres mi custodio,pues la bondad diviname ha encomendado a ti,ilumíname, guárdame, defiéndemey gobiérname. Amén.
Oración II
Ángel de mi guarda,dulce compañía,no me desamparesni de noche ni de día.No me dejes soloque me perdería.Hasta que amanezcaen los brazosde Jesús, José y MaríaAmén.