¿Qué es un santo?

lunes, 2 de noviembre de
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“Un santo es aquél neurótico que se sintió salvado,
aquella prostituta que se dejó amar en serio, 
aquél herido que se dejó curar, 
aquella angustiada que se dejó alegrar la vida,
aquél mentiroso que fue encontrado por la Verdad,
aquella sedienta que bebió del agua Viva, 
aquél pobre que se dejó enriquecer,
aquella rica que se dejó empobrecer,
aquél pretensioso que se dejó llenar el alma de Dios. 

 
Aquella avara que abandonó su última moneda, 
aquél infeliz que se dejó de quejar,
aquélla guerrillera que la paz le besó los bordes de su alma, 
aquél torpe que se dejó cincelar por la sabiduría de otros,(…)
aquél que cuidó al enfermo y
pagó su cuenta al regresar de su trabajo, 
aquella que amamantó en la dificultad porque
su alimento era la fe y el amor, 
aquél que trabajó día y noche como su Padre, 
aquella que se hizo próxima al dolor del sufriente
para lavar sus lágrimas, 
aquél que sin saberlo alababa a Dios con sonrisas
esparcidas por el mundo, 
aquella abandonada que se sintió rescatada.
 
 
Aquél que perdió el esquema de perfección
para pasarse al del amor
aquella que siendo jueza de todos perdió
por la ternura del juicio del Amor, (…)
 
aquella abuela que después de darlo todo
siguió sonriendo y jugando, 
aquél perdonado que se animó a perdonar, 
aquella infiel que se dejó restaurar por el Fiel, (…)
aquella que asumió su cruz como entrega y no como castigo,
aquél que dejó de pensar la santidad como esfuerzo de su voluntad para dejarle paso a la fuerza arrolladora de la gracia que el Espíritu derrama sin cesar en nuestra vida. “
 
Emmanuel Sicre, sj
 

 

Fer Gigliotti