Essena O’neill es una joven australiana que cerró sus cuentas de Instagram y YouTube con más de un millón de seguidores ¿Por qué lo hizo? Estaba cansada de su “vida perfecta” llena de lo que todo el mundo podría soñar: belleza, fama, dinero, admiración… pero vacía y falsa, sin idea de quién era o por qué hacía lo que hacía.
“A través de las redes sociales, creé una una imagen alrededor de la belleza y de momentos editados de mi vida personal. No quiero que mi vida vuelva a ser así. Y ya no quiero ganar dinero promocionando productos. No quiero likes ni seguidores para determinar el éxito de mi trabajo o de mi persona. Crecí siendo realmente adicta a las redes sociales y lejos de ellas la vida es genial sin la constante comparación con momentos editados de alguien más.”
“No sentía que estaba viviendo una vida de integridad y pasión. Mirando la vida de los demás todo el día a través de una pantalla limité mi propio potencial. Me alejé de las redes sociales, que me estaban consumiendo, para focalizarme completamente en lo que es importante para mi alma.”
A través de su sitio web “Let’s be game changers” (Cambiemos el juego) Essena invita a otros a hacer lo mismo: A dejar de concentrarse en las superficialidades, las cuales son efímeras, para prestar más atención a lo que es verdadero y profundo. En su sitio, comparte poemas, escritos y videos de otras celebridades que también impulsan el cambio. Porque ser auténtico y abrir el corazón al contacto real con los demás, quitando todo tipo de pantallas de por medio, es el verdadero camino de la felicidad.
“Sin darme cuenta, gasté la mayor parte de mi adolescencia siendo adicta a las redes sociales, buscando estatus y la aprobación de los demás. Desperdicié la mayoría de las horas de mis días desplazando el cursor del mouse en Youtube… ¿Cómo descubriremos el sentido de nuestras vidas si somos de esta manera?”