“Demente por querer vivir contrario a la corriente por querer hacer las cosas diferentes por decir que escucho del cielo una voz.
Demente por creer que aun existen los milagros que no son casualidad ni tan extraños.Porque me he acostumbrado a verlos en mi, porque he peleado mis mejores batallas de rodillas en mi habitación.(…)
Demente por creer en el perdón a toda cuesta aún cuando la herida fue violenta (…)Demente por mostrar amor a aquel que me rechaza y creer que todavía hay esperanza(…).”
Tercer Cielo