Jesús dijo a sus apóstoles:Cuídense de los hombres, porque los entregarán a los tribunales y los azotarán en las sinagogas. A causa de mí, serán llevados ante gobernadores y reyes, para dar testimonio delante de ellos y de los paganos.
Cuando los entreguen, no se preocupen de cómo van a hablar o qué van a decir: lo que deban decir se les dará a conocer en ese momento, porque no serán ustedes los que hablarán, sino que el Espíritu de su Padre hablará en ustedes. El hermano entregará a su hermano para que sea condenado a muerte, y el padre a su hijo; los hijos se rebelarán contra sus padres y los harán morir.
Ustedes serán odiados por todos a causa de mi Nombre, pero aquel que persevere hasta el fin se salvará.
Palabra de Dios
P. Juan Martinez sacerdote de la Arquidiócesis de Córdoba
Buen día Amigos de Oleada Joven! Gustamos en estos días de la Luz, nacida en Belén, que es Jesús. En Él gustamos el amor de Dios que ha querido acercar a la humanidad una presencia cercana y llena de esperanza.
La memoria de San Esteban, diácono y mártir, a quien hoy celebramos nos dice que este resplandor del Dios con nosotros, tiene toda la ternura del Niño recién nacido y acostado en un pesebre junto a la fuerza de la verdad que es capaz de inquietar los corazones poco amigos de Dios como son los de aquellos que martirizan a Esteban.
El evangelio de san Mateo que escuchamos nos anima a transitar la vida confiados pero no ingenuos. Asumir que el estilo de Jesús es un camino en verdad, en el bien y en la justicia es camino que da plenitud a los corazones sinceros pero acusa a los malintencionados.
Sigamos contemplando el amor de Dios hecho Niño en estos días que en la fragilidad nos clama grandeza verdadera, para que seamos fieles a Él como san Esteban ante las exigencias del día a día.
El Señor te bendiga y feliz Navidad.