Jesús, no tienes manos.
Tienes sólo nuestras manos para construir un mundo donde reine la justicia.
Jesús, no tienes pies. Tienes sólo nuestros pies para poner en marcha la libertad y el amor.
Jesús, no tienes labios. Tienes sólo nuestros labios para anunciar al mundo la Buena Noticia de los pobres.
Jesús, no tienes medios. Tienes sólo nuestra acción para lograr que todos seamos hermanos.
Jesús, nosotros somos tu Evangelio, el único Evangelio que la gente puede leer, si nuestras vidas son obras y palabras eficaces.
Jesús, danos tu amor y tu fuerza para proseguir tu causa y darte a conocer a todos cuantos podamos.
Pastoral sj