Ven Espíritu de amor. Todo mi ser ha sido
creado para amar, pero muchas veces elijo el egoísmo.
Yo se que todo lo que me regalás es para que lo comparta.
Tú quieres llenarme de cosas bellas para que sea
como un cántaro para que sacie la sed de los demás.
Me has elegido para que comunique un poco
de felicidad a mis hermanos.
Pero me cuesta compartir mis cosas y
dar mi tiempo a los hermanos.
Abre mi corazón egoísta, Espíritu de amor,
para que pueda disfrutar dándome a los demás.
No dejes que me prive de esa alegría de
un corazón generoso.
No dejes que me quede encerrado sólo
en mis propias preocupaciones y ayúdame
a descubrir a Jesús en cada hermano.
Ven Espíritu Santo, amén!
Victor Manuel Fernéndez