Evangelio según San Juan 15,26-27.16,1-4a

miércoles, 27 de abril de
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En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Cuando venga el Paráclito que yo les enviaré desde el Padre, el Espíritu de la Verdad que proviene del Padre, él dará testimonio de mí. Y ustedes también dan testimonio, porque están conmigo desde el principio.

 

Les he dicho esto para que no se escandalicen. Serán echados de las sinagogas, más aún, llegará la hora en que los mismos que les den muerte pensarán que tributan culto a Dios. Y los tratarán así porque no han conocido ni al Padre ni a mí. Les he advertido esto para que cuando llegue esa hora, recuerden que ya lo había dicho.»

 

Palabra de Dios

 

 

 

 


 

P. Javier Verdenelli sacerdote de la Arquidiócesis de Córdoba

 

 

 

Lo que hace el Espíritu es dar testimonio de Jesús. El Espíritu Santo está inseparablemente unido al Padre y al Hijo. Es el Espíritu de Jesús que el Padre nos envía, aquel mismo Espíritu que Jesús nos conquistó por su muerte y resurrección. Y nosotros, al recibir este Espíritu en el bautismo, debemos ser la prolongación de Jesús que después de su muerte continuamos su acción y somos para la humanidad la misma revelación del amor del Padre por los pobres y oprimidos.

 


 
Para la reflexión personal


• El misterio de la Trinidad está presente en las afirmaciones de Jesús, no como una verdad teórica, sino como expresión del compromiso del cristiano con la misión de Jesús. ¿Cómo vivo en mi vida este misterio central de nuestra fe?


• ¿Cómo vivo, particularmente, la acción del Espíritu Santo en mi vida?

 

 

Radio Maria Argentina