Yo ya no estoy más en el mundo, pero ellos se quedan en el mundo, mientras yo vuelvo a ti. Padre Santo, guárdalos en ese Nombre tuyo que a mí me diste, para que sean uno como nosotros.
Cuando estaba con ellos, yo los cuidaba en tu Nombre, pues tú me los habías encomendado, y ninguno de ellos se perdió, excepto el que llevaba en sí la perdición, pues en esto había de cumplirse la Escritura.
Pero ahora que voy a ti, y estando todavía en el mundo digo estas cosas para que tengan en ellos la plenitud de mi alegría. Yo les he dado tu mensaje y el mundo los ha odiado porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.
No te pido que los saques del mundo, sino que los defiendas del Maligno. Ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Conságralos mediante la verdad: tu palabra es verdad. Así como tú me has enviado al mundo, así yo también los envío al mundo; por ellos ofrezco el sacrificio, para que también ellos sean consagrados en la verdad.
Palabra de Dios
Reflexión: P. Cristian Salomon
En estos días previos a la Fiesta de Pentecostes, nos ilumina este hermoso texto del Evangelio de Juan, una parte de la oración sacerdotal de Jesús.
Jesús intercede como Hijo al Padre, pide al Padre que cuide a sus amigos, casi diría, preocupado por ellos, quiere que sean cuidados, asistidos, defendidos, protegidos del mundo, del maligno.
Jesús pide al Padre: Que los cuide (guarde) en su nombre, para que ninguno se pierda. Que los defienda del maligno. Que sean suyos por la verdad, que los Santifique.
Jesús Sabe que hay que caminar en el mundo, anunciar su Vida, ser sus discípulos sin quedar contaminados, por eso ora, pide x ellos, les promete su Espíritu. Tambien hoy sigue orando, pidiendo por vos, por mi, por todos sus discipulos. Que bueno y reconfortante es renovar la certeza de que Jesús se ocupa de sus discipulos, de aquellos que quieren permanecer en Él.
Interesante por otro parte, descubrir y aceptar que no es sencillo ser discípulos del Señor, que hay que tener cuidado, ser prudente, ser humilde. Ser discípulos en el mundo, (trabajo, facultad, colegio, noviazgo, familia, amigos, sociedad) teniendo cuidado de no contaminarnos con la mentira, con una vida light que admite las transgresiones, que se hace corrupta. No contaminarnos del desánimo o del triunfalismo, de una vida sin ideales grandes.
Encomendemos nuestra vida a la oracion de Jesús, a la oración de nuestros hermanos, siguiendo la invitación del Papa Francisco: Jóvenes, pongan en Juego sus vidas, por grandes ideales permanezcan estables en el camino de la Fe con una Firme Esperanza en el Señor. Él nos da el valor para caminar contracorriente, esto hace bien al corazón!!! pero hay que ser valientes”
Confíame Señor a tu Palabra, santificame en tu verdad, para que camine siempre tus caminos, sigue orando por nosotros, regalanos tu Espíritu Santo.
Que tengas lindo miercoles. Dios te bendiga.