El Obispo de San Nicolás en Argentina, Mons. Héctor Cardelli, emitió un decreto en el que reconoce el carácter sobrenatural del Acontecimiento Mariano ocurrido en esa ciudad del norte de la provincia de Buenos Aires.
El pasado 22 de mayo y en el marco de la multitudinaria peregrinación al Santuario de la Virgen del Rosario de San Nicolás, el Obispo afirmó al terminar la Misa que “a doce años de pastoreo en San Nicolás y habiendo seguido con fe y responsabilidad el acontecimiento mariano, que conozco desde sus inicios, he crecido en la decisión de reconocerlo para mi diócesis”.
Sobre el proceso que lo llevó a tomar esta decisión explicó que ha trabajado “en la consulta con peritos y testigos y consciente de que el deber de vigilar o intervenir compete ante todo al ordinario del lugar, asumo, como los obispos que me precedieron, la decisión de apoyar, orientar y declarar acerca de esta manifestación en San Nicolás” que comenzó en 1983.
El Prelado explicó que juzgó el hecho según dos criterios: “Positivos y negativos y en ambos casos no hubo ni hay errores” y precisó que hizo un discernimiento sobre tres criterios particulares: “El acontecimiento ¿Es de origen natural? ¿Puede ser obra del enemigo? ¿Es de origen sobrenatural?”
“Las respuestas a estos interrogantes me dejaron la certeza de que es real y positivo el fruto que supera la mera acción humana”, sostuvo.
El Obispo señaló que acompaña el decreto con la presentación del libro “La escuela espiritual de Santa María del Rosario de San Nicolás” en el que se detallan las enseñanzas “más destacadas en los mensajes que Ella nos ofrece para nuestra adhesión a todo lo que Él nos dice porque Él es el culmen de la revelación”.
“Finalmente y como la Santa Madre lo ha pedido, imploro al Cielo en nombre de toda la diócesis, que sea Ella, por siempre la Reina y Señora de San Nicolás de los Arroyos”, concluyó.
El decreto de Mons. Cardelli señala lo siguiente: “En virtud de todo lo afirmado, y como obispo diocesano facultado para este tipo de pronunciamiento; motivado por un sentido de conciencia justa, decreto con certidumbre moral, buena intención y esperanza; cumpliendo los requisitos del discernimiento sugeridos por la santa sede; buscando la mayor gloria de Dios y el bien de nuestra Iglesia; invocando el nombre de Dios Altísimo, Padre, Hijo y Espíritu Santo, el nombre de María del Rosario de San Nicolás, el de su esposo San José, reconozco el carácter sobrenatural de los felices acontecimientos con los que Dios a través de su hija predilecta, Jesús por medio de su Santísima Madre, el Espíritu Santo por medio de su dilecta esposa, ha querido manifestarse amorosamente en nuestra diócesis”.
Breve historia
En el año 1983 algunos rosarios en las casas de la localidad bonaerense de San Nicolás de los Arroyos se iluminaron sin explicación alguna. Al ver este hecho, una madre de familia de nombre Gladys Quiroga de Motta comenzó a rezarle a la Virgen que se le apareció el 25 de septiembre de ese año.
La vidente es una mujer sencilla, esposa, madre de dos hijas y abuela, que solo pudo cursar hasta el cuarto grado. No tenía mayores conocimientos bíblicos ni teológicos.
El pedido que le hizo María en las primeras apariciones fue buscar una imagen que había sido bendecida por un Papa y estaba olvidada en una iglesia.
La imagen en cuestión era de la Madre de Dios con el Niño en brazos que fue bendecida por el Papa León XIII cuando se inauguró la catedral. Fue encontrada, luego de las instrucciones de la Virgen, en el campanario del templo.
Desde el principio Gladys siempre estuvo a disposición de las autoridades de la Iglesia, compartió los mensajes de la Virgen y ahora vive de manera muy piadosa manteniendo siempre un perfil bajo.
El Obispo de San Nicolás por esos años, Mons. Domingo Salvador Castagna, aprobó la publicación y difusión de los mensajes de María del Rosario en San Nicolás y ordenó la construcción de un Santuario como la Virgen lo había solicitado, en donde cada año se realiza una multitudinaria peregrinación como la del pasado 22 de mayo.
Fuente: Aciprensa