Su risa es seguramente una de las más contagiosas de la pequeña y gran pantalla: Eddie Murphy es un actor estadounidense que, con éxitos como “Un detective anda suelto en Hollywood” y “El profesor chiflado”, por recordar dos de las cintas que han hecho reír a más de una generación.
Recientemente, el actor, que tiene ya 55 años, ha contado episodios polémicos de su pasado, en una entrevista publicada por el Hollywood Reporter (22 agosto): y sí, un momento que nunca podrá olvidar, y que considera que fue casi un milagro, tiene que ver con una salida con sus amigos John Belushi y Robin Williams quienes, por lo que parece, le ofrecieron cocaína.
“Estábamos dando una vuelta – revela Murphy – cuando John Belushi y Robin Williams me ofrecieron cocaína. Yo decidí no aceptarla y Belushi me llamó ‘reprimido’. Después de tantos años, me digo: ‘Wow, qué lejos he llegado’. Si la hubiera aceptado, la historia de Eddie Murphy habría sido muy distinta. Hay muchas veces que creo que fue la fe la que me salvó. Episodios como este no hacen otra cosa que reafirmar mi fe en Dios. Ha habido muchas ocasiones en las que habría podido quemarme y morir”.
Murphy, educado desde pequeño como cristiano baptista, afirma también que se mantuvo lejos del alcoholismo gracias a la “estrella” de la fe, que le ha guiado en medio de las tentaciones. Él, originario de Brooklyn, Nueva York, tuvo que afrontar una infancia complicada, marcada por el asesinato de su padre y la vida en la calle.
A diferencia de Murphy, sus dos amigos se “rompieron” tras una vida de excesos y toxicodependencia. John Belushi murió en 1982, cuando sólo tenía 33 años, por sobredosis, mientras que Robin Williams se quitó la vida hace dos años después de un largo periodo de depresión.
En su última película, “Mr Church“, Eddie Murphy un gran papel lleno de humanidad, la de un cocinero que atiende a una familia cuya madre está gravemente enferma de cáncer.
Fuente: Aleteia