Momento para todo

domingo, 25 de septiembre de
Hay un momento para todo y un tiempo para cada cosa bajo el sol:

 

Un tiempo para nacer y un tiempo para morir, un tiempo para plantar y un tiempo para arrancar lo plantado;

 

un tiempo para matar y un tiempo para curar, un tiempo para demoler y un tiempo para edificar;

 

un tiempo para llorar y un tiempo para reír, un tiempo para lamentarse y un tiempo para bailar;

 

un tiempo para arrojar piedras y un tiempo para recogerlas, un tiempo para abrazarse y un tiempo para separarse;

 

un tiempo para buscar y un tiempo para perder, un tiempo para guardar y un tiempo para tirar;

 

un tiempo para rasgar y un tiempo para coser, un tiempo para callar y un tiempo para hablar;

 

un tiempo para amar y un tiempo para odiar, un tiempo de guerra y un tiempo de paz.

 

¿Qué provecho obtiene el trabajador con su esfuerzo?
Yo vi la tarea que Dios impuso a los hombres para que se ocupen de ella.

 

El hizo todas las cosas apropiadas a su tiempo, pero también puso en el corazón del hombre el sentido del tiempo pasado y futuro, sin que el hombre pueda descubrir la obra que hace Dios desde elprincipio hasta el fin.

 

Yo comprendí que lo único bueno para el hombre es alegrarse y buscar el bienestar en la vida.
Después de todo, que un hombre coma y beba y goce del bienestar con su esfuerzo, eso es un don de Dios.

 

Yo reconocí que todo lo que hace Dios dura para siempre: no hay que añadirle ni quitarle nada, y Dios obra así para que se tenga temor en su presencia.

 

Magali Baez