Hoy celebramos el día de la “Mater de Schoenstatt”. Se conmemora el día en el que el Padre José Kentenich, junto a un grupo de jóvenes se consagraron a la Virgen pidiéndole a María que se estableciera en el Santuario de ellos. Y que desde allí regalara abundantes dones y gracias que su Hijo Jesucristo le concede. A cambio ellos lo ofrecían sus oraciones y sus sacrificios, sus éxitos y sus fracasos.
Por lo tanto la devoción no surge de una Aparición de la Virgen dejando un mensaje sino de una Alianza de Amor que se establece entre María y sus devotos ante una pintura de origen italiano que es la que preside el Altar de cada Santuario en el mundo.
Señora mía, Madre mía, yo me ofrezco todo a Tiy en prueba de mi filial afecto te consagro en este día,mis ojos, mis oídos, mi lengua mi corazón,en una palabra, todo mi ser.Ya que soy todo tuyo,Madre de bondad guárdame, defiéndeme y utilízamecomo instrumento y posesión tuya.
Amén
En tu podery tu bondadfundo mi vida,en ellos esperoConfiando como niño.Madre Admirable,en ti y en tu Hijoen toda circunstanciacreo y confíociegamente .Amén