Facundo Zazu, un joven de 17 años, que hasta hace unos meses vivía una vida normal, a raíz de una grave enfermedad hoy es testimonio de la fuerza de la fe y la oración. El sentido pedido de su padre llevó a toda Traslasierra a unirse en oración pidiendo a Brochero intercesión por su salud.
Facundo comenzó a sentir que sus piernas y luego todo su cuerpo se inmovilizaban, por esto sus padres lo llevaron a Córdoba Capital donde quedaría internado en estado delicado dado que la situación avanzaba. Fue diagnosticado con el síndrome de Guillain-Barré. Después de varios días y de probar diferentes tratamientos el cuadro no era alentador y a sus padres le habían comunicado que quizás su hijo no tenía mucho tiempo de vida y si lograba salvarse podría quedar cuadripléjico o en estado vegetativo.
Juan, papá de Facundo, se retiró de la habitación donde estaba su hijo y grabó un audio con un pedido desgarrador que enviaría a sus amigos por Whatsapp. Pedía que por favor rezaran por Facundo. Esa suplica desgarradora comenzó a compartirse entre todos los vecinos de Traslasierra. Se comenzaron a realizar cadenas de oración y mensajes de apoyo a la familia con la frase “Fuerza Facu” que incluso fue puesta en la tumba del entonces Beato Brochero junto a la foto del joven.
Foto: La foto de Facundo junto a la tumba del Cura Brochero
El audio se conoció el día miércoles y el jueves se organizó una misa para pedir la intercesión de Brochero por Facundo. Aquel día la iglesia desbordaba de vecinos y amigos que pedían con fe por esta causa. Toda gente de la zona que se había reunido en el Santuario de Villa cura Brochero clamando a Dios y haciéndose eco del pedido de Juan. A su vez, Sandra Violino, mamá de Nico Flores, el famoso “niño del milagro” por el cual el Cura Gaucho fue beatificado, le acercó a la familia el poncho de Brochero, el cual Juan colocó sobre Facundo mientras rezaban la oración por su intercesión.
Poco tiempo paso para que Facu comenzara a despertar de aquella pesadilla, a los días la comunidad tenía noticias a través de Diana, su mamá, que estaba respondiendo bien a un último tratamiento y que ya podía mover algunos dedos de su mano.
Foto: Los comercio de la zona mostraban carteles con mensajes para Facundo
Hoy Facundo esta nuevamente en casa junto a su familia, lleno de fe y gratitud a Dios, a Brochero y a toda la gente de Traslasierra que se unió en oración para pedir aquello que parecía imposible. Facundo se sigue recuperando, camina con un andador pero lleno de esperanza y optimismo ya que su recuperación está siendo más temprana de lo que los médicos señalaban. La historia de esta familia es un verdadero testimonio de como la fe “mueve montañas” a través de la oración.
Foto: Familia Zazu. La Gaceta de Tucumán