El gozo se define con frecuencia como una emoción positiva que resulta del bienestar, del éxito, de la buena fortuna o de poseer lo que uno desea. Dadas las circunstancias mundiales actuales, el gozo definido así puede considerarse inalcanzable para muchas personas.
Desde una perspectiva psico-espiritual, el gozo procede de un lugar más profundo dentro de nosotros y puede entenderse mejor como el resultado de una serie de elecciones conscientes por nuestra parte. El gozo no depende de circunstancias externas específicas, o de una cierta evolución de las situaciones; tampoco depende de la presencia o comportamiento de una persona particular. El gozo, un don disponible en cada momento de nuestras vidas, requiere, sin embargo, cuidarlo.
Algunos elementos que nos proporcionan gozo:
Fuente: pastoralrscj.blogspot.com.ar