¿Que quieres Señor de mi?
Una vez mas, vuelve esa tan profunda pregunta a mi corazón y de tantos jóvenes, que muchos no la oyen por el ruido del mundo. Una pregunta que requiere una respuesta para toda la vida, una respuesta sincera, que de sentido a cada momento de la vida que nos regala Dios y buscar la santidad en lo cotidiano.
Sopla espíritu, sopla… Quiero encontrar a Cristo en cada niño solo, sufriendo; en cada abuelo que esté en soledad, que sólo necesita a alguien que le preste su oído, que lo tome de la mano, que le regale una caricia, un beso… y que vuelva a encontrar la dignidad que cree haber perdido. Quiero encontrarte, amigo Jesús, en aquel matrimonio en crisis, en aquella familia quebrada por el egoísmo y el individualismo, ahí… en lo simple, deseo encontrarte.
¿Que quieres, Señor de mi? Pregunta que da vueltas en el corazón, muchas veces sin saber que hacer, pero tener la certeza de que Dios nos ama y nos llama por nuestro nombre…
Tobias Narballo