Evangelio segun San Juan 6, 22-29

sábado, 7 de mayo de
image_pdfimage_print

 Al día siguiente, la gente continuaba en la otra orilla del lago. Se habían dado cuenta de que allí solamente había una barca y sabían que Jesús no había embarcado en ella con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos.
Otras barcas llegaron de Tiberíades, y se detuvieron cerca del lugar donde la gente había comido el pan, después que el Señor había dado gracias a Dios. Cuando se dieron cuenta de que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, subieron a las barcas y se dirigieron a Cafarnaún en busca de Jesús. Lo encontraron en la otra orilla y le dijeron: 
«Maestro, ¿cuándo has llegado aquí?» 
Jesús les contestó: 
«Les aseguro que no me buscan por los signos que vieron, sino porque comieron pan hasta saciarse. Esfuércense por conseguir no el alimento transitorio, sino el permanente, el que da la vida eterna. Este es el alimento que les dará el Hijo del hombre, porque Dios, el Padre, lo ha acreditado con su sello».
Ellos le preguntaron: 
«¿Qué debemos hacer para actuar como Dios quiere?» 
Respondió Jesús: 
«Esto es lo que Dios espera de ustedes: que crean en aquél que él envió».

 

Oleada Joven