Evangelio según San Juan 13,16-20

miércoles, 10 de mayo de
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Después de haber lavado los pies a los discípulos, Jesús les dijo: “Les aseguro que el servidor no es más grande que su señor, ni el enviado más grande que el que lo envía. Ustedes serán felices si, sabiendo estas cosas, las practican.

 

No lo digo por todos ustedes; yo conozco a los que he elegido. Pero es necesario que se cumpla la Escritura que dice: El que comparte mi pan se volvió contra mí. Les digo esto desde ahora, antes que suceda, para que cuando suceda, crean que Yo Soy. Les aseguro que el que reciba al que yo envíe, me recibe a mí, y el que me recibe, recibe al que me envió”.

 

Palabra de Dios

 

 

 

 


 P. Cristian Salomón Sacerdote de la Parroquia Santa Teresa de Jesús, de Santa Teresa, Arquidiócesis de Rosario 

 

 

 

 

 

 

La Palabra de Dios, en a liturgia, nos vuelve el corazón al momento de la ultima cena, después del lavatorio de los pies. Jesús después de explicar lo que había realizado, les sigue hablando a los discípulos, afirmándoles, que el siervo no puede ser más que su señor y el enviado más que quién lo envia, esta afirmación se las dice para que puedan ponerlo en practica y de este modo ser dichosos,y los prepara, poniéndolos en aviso respecto a la traición de judas y lo que van a vivir y experimentar.

 

Ser discípulo de Jesús, seguir sus huellas, es don y tarea, es una gracia que nos viene de lo alto y también una camino, un estilo de vida que estamos llamados a vivir. Asi como Él se arrodillo ante los discípulos y se abaja hasta nosotros, nosotros estamos llamados a poder también abajarnos, arrodillarnos ante los hermanos, reconociéndonos hijos amados y por tanto también hermanos entre nosotros.

 

El servicio, la fraternidad, la humildad, tendrían que ser las caracteristicas más sobresalientes de todos aquellos que queremos seguir a jesús, en primer lugar porque, Él nos dejo su ejemplo, dando la vida, y además porque Él mismo no los deja como tarea.

 

Sin embargo, cuanto nos falta!!, seguimos como sociedad, todavia, buscando no tanto servir, sino mostrar que somos más que tal o cual, seguimos enfrentados, sin poder reconocernos hermanos. Incluso en nuestras comunidades Cristianas, pasa a veces, que queremos ser o nos creemos más que los demás, y lo manifestamos no en el servicio, sino en el poder y/o seudo autoridad.

 

“Ningun siervo, puede ser más que su señor, ni el enviado mas que quien lo envia” dice también Jesús, “y ustedes son todos hermanos” Mt. 23, 8

 

Dios nos regale la gracia, por medio de Jesús y de María de poder siempre reconocernos necesitados y servidores enviados, seguimos a Jesús porque necesitamos de Él, siempre sirviendo en la humildad a los hermanos, porque dándonos nos hacemos dichosos, porque Él nos llena de Vida.

 

Danos Señor un corazon grande para amar, danos un corazon humilde para servir siguiendo tu ejemplo

 

Que tengas lindo día, Dios te bendiga

 

Radio Maria Argentina