Sin vos, no quiero, no puedo…

Jesús, 

que no traspapele la paciencia
y acepte Tus modos de alcanzarme.

 

Háblame como quieras
pero dame claridad en la mirada de mi escucha,
que no deje pasar de largo Tus palabras para mí.

 

Que cada instante sea la hora de creer,
pero ayudame a crecer.

Que sin Vos no puedo,
sin Vos no quiero.

 

Y si en el camino descubro que cada uno va por su lado,
y hasta yo me alejo mí mismo,
que la Verdad de que el Padre está conmigo me re-encuentre.

Si 

Pero cuando las lágrimas sean tantas que hagan surco,
que en Vos halle la valentía
que se edifica en que ya venciste,
para seguir.

Amén

 

 

LUNES 29 MAYO
Evangelio según San Juan 16,29-33

 

Oleada Joven