Muchos dicen que París es la ciudad de la luz, otros dicen que es la de la moda, y también hay quienes (muchos) la llaman la ciudad del amor. La popular capital francesa ha inspirado a numerosos artistas, y los cineastas no están excentos de este encanto. París Je t’aime es una película que reune diversos tópicos en torno al amor que levita en las calles y escondites de esta gran ciudad.
¿De qué va? Como lo indica su nombre, esta película francesa tiene como pilar que, en París, el amor está por todas partes: En las cafeterías, en las calles abandonas, en las avenidas más importantes, bajo la famosa Torre Eiffel, en el metro y en el café… En definitiva, el film reune diversos momentos que hablan sobre el entrañable encuentro de personas que se aman.
Los cortos que forman parte de esta película fueron interpretados por famosísimos actores, así como también dirigidos por prestigiosos directores: Olivier Assayas, Frédéric Auburtin, Gérard Depardieu, Gurinder Chadha, Sylvain Chomet, Joel Coen, Ethan Coen, Isabel Coixet, Wes Craven, Alfonso Cuarón, Christopher Doyle, Richard LaGravenese, Vincenzo Natali, Alexander Payne, Bruno Podalydès, Walter Salles, Daniela Thomas, Oliver Schmitz, Nobuhiro Suwa, Tom Tykwer, Gus Van Sant.
Personalmente, este film me trasladó a las calles parisinas con sabor a nostalgia, algo de remembranza y de “extrañitis aguda”, y no, no es que haya vivido grandes amores en París o que mis recuerdos me lleven a Montmartre. Lo que pasa es que el foco de atención de esta película pone a los lugares en segundo lugar.
El centro de todo lo que vemos radica en las relaciones humanas, los encuentros casuales y los planeados, el amor de los amantes, de los padres a sus hijos, de las desiciones mal tomadas… Entonces ¿Sólo es esta la ciudad del amor? No.
En este aspecto me niego a decir que París sea la protagonista, aquí el aspecto central es el amor al prójimo en todas sus formas, con aciertos y errores, pero sincero. Somos tan humanos que al amar nos equivocamos muchísimo, damos a medias, somos orgullosos, hasta nos enojamos con nosotros mismos, pero en este film podemos ver que eso es tan natural como bañarse todos los días.
Los invito a ver esta peli, a enamorarse de las personas que tienen al lado, a tomar la iniciativa de buscar a Jesús en el otro, de amar de forma sincera y, sobre todo, de no quedarnos sentados esperando un milagro. En un corazón grande sobran las opciones para amar, no lo olviden.
Aquí les dejo el trailer:
¿Los convencí? Aquí les dejo el link para que puedan verla y descubran que el amor está en todas partes.