Mi Jesús pequeño, real y trascendente misterio. Te hiciste uno como nosotros, en María, en su maternal seno. Mi Jesús pequeño, no había lugar para los tres. Todo posada les cerraron, y naciste en sencillez. Mi Jesús pequeño, ya cantan los ángeles, y adoran los pastores ¡ Alabado el Mesías, Santo es su Nombre! Mi Jesús pequeño: ¡Ya llegó la hora! Es tiempo de tu venida, de tu entrega y de tu Gloria. Mi Jesús pequeño, de humilde condición, viniste a este mundo, para darme salvación. Mi Jesús pequeño, todo humano, todo Dios. Naciste en ese pesebre, para ser mi Salvador. Mi Jesús pequeño, de realeza divina, te hiciste todo nada para ser el Dueño de mi vida. Mi Jesús pequeño ¡La Esperanza está en pañales!, entraste y mi corazón conmoviste Nada será igual que antes.