El Faro de los ahogados – Pedro Aznar

jueves, 9 de junio de

Cuantas veces escuchamos las canciones sin detenernos a meditar las letras, nos enganchamos con la melodia, se nos pega el estribillo y la repetimos hasta que se convierten en favoritas. Y cuantas veces esas letras son mensajes directos al corazon porque fueron escritos desde una experiencia de vida. Por eso desde Clave de sol, en el espacio de oleada joven, queremos reflexionar y detenernos tambien en las historias detras de las canciones y el significado que tienen para sus compositores y pueden tener para todos nosotros.

Cuando Hebert Viana, el lider de la legendaria banda brasilera Os Paralamas do Sucesso escribio esta cancion alla por mediados de la decada del 80 nunca se debe haber imaginado el profundo valor autobiografico que tendria años posteriores cuando en un tragico accidente de avion perdio a su esposa y quedo paraplejico. Y es en esos momentos dificiles, cuando te falta el aire y sentis que ya no podes seguir, cuando mas se necesita la luz de un faro que te marque el rumbo..  El Faro de los ahogados podes ser vos!, un puerto abierto para aquel que necesita un abrazo, un gesto, una oracion… 

Despues de un largo proceso de recuperacion y de muchos faros que iluminaron su camino al final del tunel, Hebert volvio a los escenarios y a componer canciones tan bellas como esta que a continuacion te regalo en la magnifica interpretacion del argentino Pedro Aznar. 

Por Diego Gimenez (en twitter @diegosgimenez)

 

 

Letra de la canción
Faro de los ahogados
Intérprete: Pedro Aznar
Herbert Vianna

Cuando está oscuro y ya nadie te oye
cuando cae la noche
y no parás de llorar

Al final del túnel de los desahuciados
hay un puerto abierto
a quien ansía llegar

Yo estaré en el faro de los ahogados
Te estaré esperando
No vayas a demorar

Una noche larga de una vida corta
pero no me importa
basta poderte ayudar

Y son tantas marcas que ya forman parte
del que soy ahora
pero no pienso aflojar

Yo estaré en el faro de los ahogados
Te estaré esperando
No vayas a demorar.

 

Diego Gimenez