Evangelio segun San Mateo 11, 20-24

lunes, 11 de julio de
image_pdfimage_print

Entonces Jesús comenzó a recriminar a aquellas ciudades donde había realizado más milagros, porque no se habían convertido. "¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros realizados entre ustedes se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace tiempo que se habrían convertido, poniéndose cilicio y cubriéndose con ceniza.  Yo les aseguro que, en el día del Juicio, Tiro y Sidón serán tratadas menos rigurosamente que ustedes. Y tú, Cafarnaún, ¿acaso crees que serás elevada hasta el cielo? No, serás precipitada hasta el infierno. Porque si los milagros realizados en ti se hubieran hecho en Sodoma, esa ciudad aún existiría. Yo les aseguro que, en el día del Juicio, la tierra de Sodoma será tratada menos rigurosamente que tú".



Palabra de Dios


 

P. Gustavo Gatto   Asesor de la Pastoral Juvenil de la Diócesis de Villa María

 

 

Hola querido amigo y amiga de la Radio María y de la Oleada Joven. Hoy en el Evangelio nos encontramos con una queja de Jesús, con un lamento de Jesús, no hay muchos pero son contundentes. Jesús mira una ciudad y le recrimina dos ciudades donde había realizado milagros¡Ay de ti, Corazaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros realizados entre ustedes se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace tiempo que se abrían convertido”.

 

Es una invitación esta palabra de Jesús a la conversión, Dios le hablaba a estas ciudades a través de los milagros y los signos de Jesús, pero estas ciudades o las personas que vivían en estos lugares no pudieron descubrir el significado de estos milagros de Jesús; como que se quedaron en la cascara, se quedaron en lo espectacular.

 

También el Señor nos habla a nosotros a través de lo que nos acontece, de lo que nos pasa. Todo lo que nos va pasando en la vida, todo lo que nos va aconteciendo, que nos va sucediendo… a veces por responsabilidad nuestra, a veces sin ninguna responsabilidad de parte nuestra, en nuestros entornos, en nuestros contextos son palabras que Dios nos da, son signos que Dios nos da para que, Para invitarnos a acercarnos más a Él. Todo lo que nos sucede es una invitación que Dios nos hace para acercarnos a Él, hasta podemos decir que el pecado es permitido por Dios para que podamos sacar de el un acercamiento al Señor. En ese sentido, la fe es un modo de comprender la vida, ¿qué es la fe? La fe es un modo de mirar los acontecimientos de una forma nueva, para que esos acontecimientos nos acerquen al Señor. Como decían algunos pensadores “Es una hermenéutica, es un modo de comprender nuestro mundo”.

 

Entonces que este lamento de Jesús, que esta queja de Jesús, hay de ti sea para nosotros una invitación, sea para nosotros una fuerte motivación a acercarnos cada día a Jesús y a no perder la oportunidad de leer, de descubrir en todo lo que nos pasa la mano cariñosa de Jesús.

 

Que tengas una buena semana.

 

Oleada Joven