Estamos en la puerta del último mes del año y llegó el momento de darle lugar en la agenda a los encuentros con los distintos grupos de amigos para despedir el año, para celebrar!!!
Los amigos del colegio, los de la facu, los del trabajo, los de la parroquia, etc, van exigiendo su lugarcito con distintas propuestas que nos invitan a festejar que un nuevo año termina, llega a su fin.
En La Oleada quisimos descucbrir y compartir cuáles son las verdaderas razones que tenemos para celebrar la vida en este tiempo.
Siempre, aun cuando el año haya sido difícil o los objetivos que nos fijamos hayan sido alcanzados, si miramos trascendentalmenten todo lo vivido encontraremos más de un motivo para celebrar, junto a aquellos con los que compartimos el camino, el don de la vida.
Muchas veces las grandes razones que tenemos para celebrar la vida son las personas con las que compartimos el año, es por eso que a cada uno de ellos va dedicado el siguiente poema:
Poema para un amigo del alma.
Encontrarte fue un lujo que me fue concedido, por una suerte impensada, por privilegio divino. Poder conversarlo todo con transparencia y con calma sin temer monotonía ni tristes palabras vanas. Atreverse a compartir sueños aunque no sean compartidos, imaginando el tiempo, de los pasados vividos, aventuras que fueron o que jamás exisitieron. Descubrirme en tu mirada en la complicidad y en la risa, Y SIN ESPERAR NADA PODER ENCONTRARLO TODO en el secreto milagro de un instante sagrado. E intuir el silencio, y respetar la distancia, la angustia, los temores, la desesperación y su trama. No esconder lo que pienso, no necesitar máscaras, celebrar las disidencias… reconocer, a un amigo del alma. UN ESPIRITU AMIGO QUE CON SU ANDAR TRAE LA CALMA A MI DESCONCERTADA ALMA