Evangelio según San Marcos 6, 30-34

viernes, 3 de febrero de
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En aquel tiempo, los apóstoles volvieron a reunirse con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. Él les dijo: "Vengan ustedes solos a un sitio tranquilo a descansar un poco." Porque eran tantos los que iban y venían que no encontraban tiempo ni para comer. Se fueron en barca a un sitio tranquilo y apartado. Muchos los vieron marcharse y los reconocieron; entonces de todas las aldeas fueron corriendo por tierra a aquel sitio y se les adelantaron. Al desembarcar, Jesús vio una multitud y le dio lástima de ellos, porque andaban como ovejas sin pastor; y se puso a enseñarles con calma.

 

Palabra de Dios

 

 


 

De nuestra redacción.

 

 

El evangelio de hoy, nos viene muy bien para este tiempo en donde muchos tienen la posibilidad de disfrutar de las vacaciones y de un tiempo de descanso. Los que siguen con trabajo y estudio, también tienen mayores oportunidades en este tiempo de verano para recrearse y disfrutar el tiempo libre. Trabajes, estudies o estés de vacaciones, se respira un clima diferente.


Y hoy el evangelio nos presenta a Jesús que invita a sus discípulos a un lugar apartado para descansar. Nos dice la Palabra que había veces que no tenían tiempo ni para comer; la actividad es mucha y para quienes son conscientes de la gran misión que se les confía, no hay tiempo que perder. Quizás a vos también te pasa… sentís que nada alcanza, que siempre hay mucho más por hacer. Pero hoy el Señor nos invita a ir a un lugar aparte para descansar en Él.


El año transcurrido, las horas de trabajo y estudio, las aventuras compartidas, los proyectos iniciados, el intento de ser fiel a lo de todos los días, los amores y desamores, los desencuentros, las batallas perdidas y las cimas conquistadas… todo va dejando su marca en el corazón. Y qué lindo que así sea! No da lo mismo vivirlos o no! Es una linda oportunidad la que nos presenta el Señor para volver a pasar por el corazón todo lo vivido y dar un inmenso GRACIAS. Porque todo es gracia de Dios, incluso los momentos de oscuridad y dolor. Él siempre está, y cuida de nosotros como si fuéramos el único habitante de la tierra.


¡Que tengas un hermoso sábado y que puedas descansar en Él sabiendote abrazado por su amor!

 

 

 

 

Oleada Joven