La Sagrada Escritura se lee correctamente en actitud orante, es decir con la ayuda del Espíritu Santo, bajo cuya influencia se ha formado. Es la Palabra de Dios y contiene la comunicación decisiva de Dios para nosotros.
La -> Biblia es como una larga carta de Dios a cada uno de nosotros. Por eso debo acoger las sagradas escrituras con gran amor y con reverencia. En primer lugar se trata de leer realmente la carta de Dios, es decir, no escoger detalles y dejar de lado el conjunto. El conjunto debo interpretarlo desde su corazón y misterio: Jesucristo, de quien habla toda la Biblia, también el ANTIGUO TESTAMENTO. Por tanto debo leer las Sagradas Escrituras en la misma fe viva de la Iglesia, de la cual han nacido.
Material extraído del YouCat, Catecismo Joven de la Iglesia Católica.
Ediciones Encuentro, Madrid 2011
Parte I: Lo que creemos
Nos puede ayudar a seguir reflexionando: