Nadie ha subido al cielo, sino el que descendió del cielo, el Hijo del hombre que está en el cielo. De la misma manera que Moisés levantó en alto la serpiente en el desierto, también es necesario que el Hijo del hombre sea levantado en alto, para que todos los que creen en él tengan Vida eterna. Sí, Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.
Palabra de Dios
Reflexión: P. Mariano Cortes Asesor de la Pastoral Juvenil de la Diócesis de 9 de Julio
Hoy la Iglesia celebra la Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. Es la fiesta en la cual se conmemora el encuentro de la reliquia de la Cruz de Jesús en Jerusalén y la recuperación, posteriormente en el año 628.
¿Para que celebrar la Fiesta de la Exaltación de Cruz? ¿Que quiere la Iglesia de nosotros? Nos ayuda a descubrir en la Cruz de Jesús, no solamente el sufrimiento sino también el sentido del amor de Dios expresado en la entrega generosa de su Hijo Jesús. "Dios amo tanto al mundo, que entrego a su Hijo Único, para aquel que crea en Él no muera, sino que tenga vida eterna".
Al contemplar la Cruz, el Papa Benedicto XVI invitaba, a los jóvenes en la Jornada Mundial de la Juventud a descubrir la sabiduría misteriosa de la Cruz. Esa sabiduría que esta escondida en ella y que es justamente la sabiduría del amor de Jesús. Por eso en este día podemos preguntarnos … ¿Cada uno descubre en la Cruz de Jesús el signo del amor de Dios?
¿Experimentaste en tus propias cruces, en tus dolores, en tus dificultades el amor que Dios nos tiene, por el cual nos acompaña y nos sostiene? Esta es invitación de la liturgia de hoy.
Te dejo en la companía de la Palabra, para que sea tu alimento y tu guia. Te dejo mi Bendición en el Nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo, Amén.