Padre bueno, hoy la creación estalla de alegría… los pájaros te ofrecen su mejor melodía, las flores se visten de colores nuevos y a nosotros se nos escapa una sonrisa.
Vení con tu vida nueva a resucitarnos, renovanos desde dentro, soplá con tu brisa refrescante sobre nuestro corazón cansado y hastiado.
Inúndanos, Señor, con la vitalidad de tu presencia. Yo también quiero ofrecer mi mejor flor en esta temporada, pero necesito de Vos…. Necesito de tu amor para poder ofrendar mi vida, para que despiertes en mí lo mejor que Vos sembraste.
Creador de todo y de todos, recreame desde dentro… hacé renacer en mí la esperanza de quien sabe que lo mejor está llegando.
Amén.
De nuestra redacción