En esta luz del nuevo día que me concedes, oh Señor, dame mi parte de alegría y haz que consiga ser mejor.
Dichoso yo, si al fin del día un odio menos llevo en mí, si una luz más mis pasos guía y si un error más yo extinguí.
Que cada tropiezo en el sendero me vaya haciendo conocer cada piedra traicionera que mi ojo innoble no supo ver.
Que ame a los seres en este día, que a todo que cruce ame la luz, que ame mi gozo y mi agonía, que ame el amor y ame la cruz.
Amén
Liturgia de las Horas