Con palabras simples…
Señor, hoy no vengo
con pensamientos profundos,
ni palabras bellas,
ni con un poema o una canción…
Vengo a pedirte, simplemente,
que vengas y te quedes a mi lado,
que actúes a pesar de mí.
Me siento alejado,
me cuesta encontrarte,
no puedo generar un espacio
para orar y estar con Vos.
Pero sé que me hace falta Tu presencia,
sé que necesito de Tu Amistad y todo lo que en ella me regalás:
paz, sabiduría, esperanza, fuerza, voluntad… Amor.
Por eso, simplemente te traigo esto:
mi debilidad para darte el lugar que quiero que tengas en mi vida
y mis ganas de que estés acá y ahora conmigo.
Vos sabés lo que tengo en mi corazón mejor que yo.
Hacelo tuyo, tómalo, transformalo.
Así, de a poco, sé que iré llegando a donde Vos me querés llevar.
Amén