Si el hombre no hace crecer el asfalto,
el asfalto por sí solo no crece.
En cambio no necesita hacer crecer las plantas,
y ellas solas cubrirán el asfalto.
Así la Vida es vida por sí sola,
y crece sin necesitar la dedicación del hombre,
pero lo que es de muerte
es construcción dedicada del hombre.
La Vida brota y nadie lo puede evitar,
aunque nos llenen de asfalto los campos del alma,
brota por las grietas..
La Vida está hecha para el Amor,
aunque nos quieran atacar con malas intenciones.
La Vida y el Amor perduran,
permanecen, continúan..
La Vida no muere, el Amor es infinito,
y eso NADIE lo puede cambiar.
Dedicado a mi familia. Virginia Mardegán.