Oh María, Madre mía,Virgencita de Luján,amparame y guiame a la Patria celestial.
En un día de milagro junto al río de Luján,te quedaste con nosotros tierna Madre de bondad.
Hoy tus hijos que te aman, vienen juntos a rezar,por la Patria , por el mundo implorándote la paz.
La salud que es don del cielo, te venimos a implorar,oh salud de los enfermos, líbranos de todo mal.
A los hijos extraviados, que olvidaron tu bondad,con la fuerza de tus ruegos, vuélvelos a conquistar.
Que al cerrarse nuestros ojos, Virgencita de Luján,contemplemos en el cielo, tu belleza virginal.
Amén