Vení Espíritu Santo,
encendé en el corazón de tus discípulos
el fuego del anuncio y de la misión.
como fuego,
para incendiar todo lo viejo
en nuestros corazones.
como viento,
trayendo frescura a nuestras vidas.
Vení, Espíritu Santo,
como agua,
para purificarnos desde adentro.
como aceite,
para ungirnos y darle brillo a nuestras vidas.
De nuestra redacción
Milagros Rodón
No te da igual si te busco o no no te da igual si estoy triste no te da igual…
Los fariseos con algunos escribas llegados de Jerusalén se acercaron a Jesús, y vieron que algunos de sus discípulos comían…
Y Jesús, llamando otra vez a la gente, les dijo: “Escúchenme todos y entiéndanlo bien. Ninguna cosa externa que entra…
En el Amor no hay lugar para la ansiedad porque ya no quiere uno devorar la vida, saltear etapas,…
Después Jesús partió de allí y fue a la región de Tiro. Entró en una casa y no quiso que…