Evangelio según San Lucas 12,35-38

martes, 21 de octubre de
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Jesús dijo a sus discípulos: “Estén preparados, ceñidos y con las lámparas encendidas.Sean como los hombres que esperan el regreso de su señor, que fue a una boda, para abrirle apenas llegue y llame a la puerta.


¡Felices los servidores a quienes el señor encuentra velando a su llegada! Les aseguro que él mismo recogerá su túnica, los hará sentar a la mesa y se pondrá a servirlo.¡Felices ellos, si el señor llega a medianoche o antes del alba y los encuentra así!”


Palabra de Dios






 Monseñor Fernando Maletti Obispo de la Diócesis de Merlo – Moreno

 

 

Hoy la liturgia nos ofrece en el evangelio de San Lucas: Felices los servidores a quienes el Señor encuentra velando a su llegada. Una bienaventuranza que felicita la actitud abierta y despierta de quienes han orientado su vida hacia el Señor y saben relativizar las cosas pasajeras. Por lo tanto el tema central es el servicio. Estar atentos lo que hoy nos propone Jesús en este párrafo del evangelio. Toda la vida de Cristo Él dio el ejemplo, fue un servicio a los hombre y toda su doctrina es una constante invitación a que sirvamos a los demás. El Señor, recordemoslo, nace pobre en Belén para servirnos desde el lugar más humilde. Vive modestamente en Nazaret para servirnos con su trabajo. Recorre los caminos y las calles de su tierra para servirnos con su palabra, con su amistad, con sus milagros, con su perdón y con su paz. Muere en la cruz para servirnos con su redención. Se queda siempre en la Iglesia y en especial en el sacramento de su cuerpo y su sangre, la Eucaristía, para servirnos a diario con su compañía, para ofrecernos su alimento, la entrega de su propia vida.


El Señor nos ha dado el ejemplo y nos ha instado con su Palabra para que sirvamos nosotros también a Diosy por Dios a los demás, y en este servicio continuo es donde y cuando vamos a encontrar la felicidad.


Que hermoso es saber que meditando las palabras del Señor y contemplando sus acciones como cristianos nos detengamos ante los trabajos mas molestos o los servicios más incomodos. Vayamos a servir a los demás como Él lo hizo , no nos sintamos excentos por ningún motivo, es precisamente a sus más cercanos, a los apóstoles, a los que estan investidos de la más alta dignidad, diríamos dentro de la Iglesia, a los que de una manera especial se dirige el Señor con ejemplos de servicios. La actitud de todos nosotros en la vida ha de ser la del Señor: disponibilidad hacia las necesidades ajenas, que nos llevará a ayudar a los demás con mucha humildad, tanta humildad que no se advierta que estamos ayudando y por lo tanto que no nos puedan recompensar.

 

Que hermosa, que fuerte la Palabra de Dios, el Señor nos pide que no nos quedemos dormidos sino que nos mantengamos con el corazón alerta para percibir la llegada del Señor << agrego : en el servicio de cada día >>.


Que el Señor los bendiga , los cuide, los proteja y les de la Gracia que más necesiten.

 

Radio Maria Argentina