Evangelio según San Marcos 9,2-10

lunes, 23 de febrero de
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Seis días después, Jesús tomó a Pedro, Santiago y Juan, y los llevó a ellos solos a un monte elevado. Allí se transfiguró en presencia de ellos. Sus vestiduras se volvieron resplandecientes, tan blancas como nadie en el mundo podría blanquearlas. Y se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Pedro dijo a Jesús: “Maestro, ¡qué bien estamos aquí! Hagamos tres carpas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías”.


Pedro no sabía qué decir, porque estaban llenos de temor. Entonces una nube los cubrió con su sombra, y salió de ella una voz: “Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo”. De pronto miraron a su alrededor y no vieron a nadie, sino a Jesús solo con ellos.


Mientras bajaban del monte, Jesús les prohibió contar lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos. Ellos cumplieron esta orden, pero se preguntaban qué significaría “resucitar de entre los muertos”.


Palabra de Dios



 


Reflexión: P. Luis Zazano sacerdote de la Diócesis de Tucumán


 

Quien es elegido por Cristo verá grandes cosas pero también pasará grandes pruebas, así como lo vemos en la primera lectura de hoy en donde Abraham es puesto a prueba de fe, lo mismo que pasarán Pedro, Santiago y Juan.


Los elegidos por Dios son probados en la fe, y en esto vos y yo podemos sentirnos identificados, cuantas veces has visto obras de Dios en tu vida pero así también cuantas veces te tocó pasar grandes pruebas, incluso de renuncias y no te niego que son dolorosas y hasta desesperantes pero si está tu confianza en Dios lo que te cuesta ver luego será tu fortaleza para vencer, vencerte y vencer toda tentación y obstáculo de la vida, eso te recordará que Dios es providente y nunca te dejará con la manos vacías, incluso cuando creas que todos tus cartuchos de la vida ya están gastados, no te niego que las pruebas son difíciles pero la confianza en Dios es lo único que te ayudará a avanzar y a cambiar.

 

Por otra parte, vemos a los apóstoles con temor, siempre cuando se sigue al Señor hay temor, el temor es parte de nuestra transfiguración con Cristo pero esto nos lleva a recordar que nuestra vida está en el cielo, Jesús lleva a sus discípulos para mostrarles que a pesar de ver tantos rostros con odios y broncas durante su pasión y muerte no se debe borrar de sus memorias lo que están viviendo, ese momento lindo y hermoso, ese momento en que pueden casi hasta contemplar a Dios cara a cara.


Hoy el Señor te invita a vos también a tener buena memoria, a que recordes los hermosos momentos que tuviste y tenes en la vida porque vendrán momentos en que estarás al rededor de rostros con odios y broncas, recordá que Dios te prometió una vida eterna, te prometió el cielo y te puso momentos en la vida para que disfrutes de la puntita de ese cielo que es imposible de abarcar.


Por último, no tenés que olvidarte que Cristo te hace experimentar momentos para que recordés que despues de la cruz viene la gloria, nuestra vida no está marcada de oscuridad, sino que está presente la luz y la oscuridad, como cuando uno escala, al escalar aparecen nubes y pueden taparte el camino, se sugiere en esos momentos que no avances porque puedes caerte o perderte, es necesario que se espere para que el sol caliente y pasen las nubes rapido para avanzar con claridad, lo mismo en tu vida, cuando no veas bien el camino, espera y después avanzá, no desesperes si no vez, es preferible esperar y demorarse un poco pero seguros que avanzar y golpearse con algo que te puede destruir la vida.


Ánimo y recordá que la vida no está marcada sólo de dolor y caidas, no te olvides de los momentos lindos que viviste, hoy ¿podrías recordár tres momentos lindos que pasaste en tu vida? si podés entonces pasarás los momentos dificiles de este día. Buen domingo

 

 

Radio Maria Argentina