Vocación

sábado, 28 de marzo de
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La vocación es como aquella melodía que sale de ese instrumento creado con tanta perfección. Una melodía que es única, pero que puede unirse a otras para tocar el corazón.

Solo se puede llegar a ella cuando este instrumento es ejecutado por el maestro, el que lo conoce con totalidad y sabe como hacer que emita su mejor sonido.

Este instrumento que va conociéndose a medida que suenan sus notas, que va creciendo con distintos ritmos, tiempos y hasta con silencios inesperados; pero que sabe que cada cosa es necesaria, que cada una de ellas alimenta la experiencia para concluir la “obra maestra”.

Esa es la vocación. Aquella canción que se hace eterna y que manifiesta la voluntad del más grande de los artistas. Pero que es única, porque es producto de la libertad y la identidad de ese instrumento particular, es en esa canción donde él se plenifica, donde hace lucir al autor de todo.

Puede hacer nuevas melodías, algunas tristes otras más alegres… pero siempre va a elegir tocar “esa canción”, porque a pesar de lo bellas que puedan ser las demás, solo en ella se refleja lo que está en su INTERIOR, solo ella alimenta su SER, solo ella da sentido a su PASIÓN.

 

Romina Gisela Herrera