Te damos gracias, Dios nuestro, portu llamada del Bautismoa ser tu pueblo.
Te respondemos otra vez con nuestro “Sí”.
Danos fidelidad para tu causay para nuestra vocación.
Renueva con un espíritu deentusiasmo a todos los quese dedican al servicio detu pueblo.
Da a nuestros jóvenes el deseode dedicarse a este servicioen la vida religiosa, en elsacerdocio, o como diáconosy ministro laicos.
Llena sus corazones con tuEspíritu de Sabiduría paraque proclamen tu evangelio,y den testimonio de tu presenciaentre nosotros.Amén.
Fuente: United States Conference Of Catholic Bishops