La música es mucho más que un arte, un hobbie o una rama de la cultura. Hay canciones que nos transportan a mil emociones, unen a las personas y llegan a lo más profundo del alma. Sonidos que tocan las fibras íntimas y llevan a recuerdos y esperanza.
Un grupo de chicos de 8 a 15 años de barrio Villa la Tela, un asentamiento precario ubicado a la vera de la ruta 20, en el sudoeste de la ciudad de Córdoba, empezó a llenar la villa de música, de la mano de la Asociación Civil Benjaminos, que tiene como lema “un niño que toca música jamás tocará un arma“. Y con esto, a soñar con nuevas oportunidades.
La música, como el deporte, ayudan a las personas en muchos aspectos. Entre ellos, sacar de la calle a los jóvenes que no encuentran nada que hacer. En Villa la Tela, los chicos aprendieron a tocar el violín, formaron un grupo de amigos y además, mejoraron su rendimiento en la escuela. Y por si fuera poco, realizan sus propios instrumentos con Jorge Felipa y Jorge Espinosa, reconocidos luthiers que incorporarán las mandolinas el año que viene. Walter Díaz, presidente de la Asociación Civil Benjaminos, contó en diálogo con Radio María que empezaron con un comedor en el 2009, pero tiempo después decidieron hacer algo cultural. “Hicimos una encuesta, y entre los resultados, querían hacer violín. Así que arrancamos”
“A pesar de los problemas y carencias del lugar, empezamos en mayo del año pasado. Todos nos decían que no iba a andar, que era muy difícil. Pero decidimos intentarlo, y a los dos meses el tiempo nos dio la razón, y empezamos a notar cambios en los chicos desde la conducta para adelante. Logramos romper esa barrera de “esta cuadra es mía” y unir a la gente. Hay una apuesta nuestra por los niños”, cuenta Walter, conocido por todos como “el Pollo”.
“A medida que tenemos los instrumentos le damos más posibilidades a los chicos. No hay aporte del Estado, es todo a pulmón. Por eso necesitamos instrumentos e insumos para sostener el proyecto en el tiempo, que lo pensamos para unas 10 villas de Córdoba. Más que recursos económicos, es darle tiempo. Algunos papás nos decían que sus hijos no iban a saber, que eran inútiles. y a los 4 meses ya estaban tocando. Un chico de la villa, y uno de un country, tienen las mismas posibilidades en la música. Se trata de darles oportunidades“, cerró el presidente de Benjaminos, que les dio la gran oportunidad a los chicos, la que puede cambiarles la vida, con el armonioso sonido de un violín.
Fuente: Radio María Argentina
Foto: Verónica Maggi