Evangelio según San Lucas 13,18-21

martes, 29 de octubre de
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Jesús dijo entonces: “¿A qué se parece el Reino de Dios? ¿Con qué podré compararlo?Se parece a un grano de mostaza que un hombre sembró en su huerta; creció, se convirtió en un arbusto y los pájaros del cielo se cobijaron en sus ramas”.

Dijo también: “¿Con qué podré comparar el Reino de Dios?Se parece a un poco de levadura que una mujer mezcló con gran cantidad de harina, hasta que fermentó toda la masa”.


Palabra de Dios




Monseñor Fernando Maletti Obispo de la Diócesis de Merlo – Moreno


Queridos hermanos y hermanas. Queridos chicos y chicas, hoy, nos presenta el evangelio según San Lucas el texto del capítulo 13 versículos 18 al 21.Nos Habla Jesús del Reino de Dios, nos habla Jesús de la vida coherente, nos habla Jesús de ser semilla, me hace recordar a aquella otro pasaje donde Jesús dice que:


”Si el grano de trigo no muere, no da fruto”. Que importante es que seamos esa semilla que se entierra, que desaparece, para que se convierta en un árbol frondoso. ¿Con que podre comparar el Reino de Dios? Termina el evangelio de hoy. Se parece a un poco de levadura que una mujer mezclo con gran cantidad de harina, hasta que fermento toda la masa.


Queridos muchachos y chicas, el Reino de Dios, no se va a concretar, no se va a realizar en otro lugar o ambiente más, que en lo concreto de la vida de cada uno. Es semilla en este jardín, es levadura en esta harina.


El Reino de Dios se juega aquí, por eso el Papa Francisco nos hablaba en una homilía en una de las basílicas mayores de Roma allá por el mes de abril, nos decía recuérdenlo bien todos, no se puede anunciar el evangelio de Jesús sin el testimonio concreto de la vida. Quien nos escucha y nos ve, debe poder leer en nuestros actos eso mismo que oye de nuestros labios y dar Gloria a Dios.


Me viene ahora a la memoria un consejo que San Francisco de Asís daba a sus hermanos:


“Prediquen el evangelio y si fuese necesario también con las palabras, prediquen con la vida, el testimonio, la incoherencia de los fieles y de los pastores entre lo que dicen y lo que hacen, entre la palabra y el modo de vivir, mina la credibilidad de la Iglesia.”


Que hermoso, ¿no? Anunciar el Reino de Dios con nuestras palabras, que hermoso esto que acabo de leerles que dice el Papa Francisco y continúa:


“Es verdad que el testimonio de la Fe tiene muchas formas, como en un gran mural hay gran variedad de colores y matices, pero todos son importantes, incluso, los que no destacan, es el gran designio de Dios, cada detalle es importante, también el pequeño y humilde testimonio tuyo y mío, también ese escondido de quien vive con sencillez su Fe en lo cotidiano de su relaciones con la familia, el trabajo, la amistad, hay santos de cada día, santos ocultos dice el Papa Francisco, una especie de clase media de la santidad, como decía un escritor francés dice el Papa, esa clase media de la santidad de la que todos podemos formar parte concluye el Papa Francisco y los invito entonces a todos ustedes, muchachos y chicas, hermanos y hermanas que están escuchando.


Que seamos capaces de construir cada día el Reino de Dios con una vida coherente, con una vida acorde a las exigencias del evangelio, con una vida donde vallamos puliendo cada día todo aquello que son asperezas, para que nuestra Fe sea realmente una forma de vida, para que nuestra Fe sea como dice el autor del libro de los hebreos:“La seguridad de lo que no vemos y la certeza de lo que esperamos”.


Les deseo todo bien, los bendigo y que el Señor los acompañen y les de acá da uno y una de ustedes la Gracia que más necesite. Amén.


 

Oleada Joven